Adéu a Nihil Obstat | Hola a The Catalan Analyst

Després de 13 anys d'escriure en aquest bloc pràcticament sense interrumpció, avui el dono per clausurat. Això no vol dir que m'hagi jubilat de la xarxa, sinó que he passat el relleu a un altra bloc que segueix la mateixa línia del Nihil Obstat. Es tracta del bloc The Catalan Analyst i del compte de Twitter del mateix nom: @CatalanAnalyst Us recomano que els seguiu.

Moltes gràcies a tots per haver-me seguit amb tanta fidelitat durant tots aquests anys.

dijous, 18 de setembre del 2008

El diner dóna felicitat

Xavier Sala-i-Martín:
Gallup acaba de llevar a cabo una macroencuesta en 130 países, incluidos muchos países subdesarrollados, donde, además de instar a los entrevistados a evaluar su felicidad poniendo un número entre 1 y 10, se les pregunta sobre diferentes aspectos relacionados con su bienestar, como cuántas veces han reído, sonreído, se han sentido tristes o deprimidos durante las últimas 24 horas, o si se sienten libres, amados o respetados. Los nuevos datos han sido analizados por Justn Wolfers y Betsey Stevenson de la Universidad de Pensilvania y su estudio arroja resultados interesantes:

Primero, la gente de los países ricos dice ser más feliz que la de los países pobres. La correlación, de un 80%, es muy importante. Parece que la visión idílica de la pobreza que a veces hacemos desde nuestra prosperidad es un espejismo que los pobres no comparten.

Segundo, la relación entre felicidad y prosperidad no sólo no se detiene, sino que se acentúa a partir de los 15.000 dólares. Como cualquier mileurista español podría haberle explicado al profesor Easterlin, a las personas que cobran cerca de 10.000 euros anuales también (repito, también) les produce felicidad un aumento de salario.

Tercero, dentro de cada país, la gente rica es más feliz que la pobre.

Cuarto, la felicidad de casi todos los países aumenta con el paso del tiempo. Hay excepciones como Bélgica, cuya felicidad ha decrecido (eso de tener tanto gobierno europeo parece que no les sienta bien a los belgas) y Japón, donde la felicidad se estancó en 1990 a raíz de la profunda crisis económica que todavía no ha superado.

Quinto, en los países ricos hay más gente que dice haber reído o sonreído en las últimas 24 horas y hay menos gente que dice haber experimentado dolor, depresión, aburrimiento o enfado.
L'estudi també destaca que la felicitat de les dones ha caigut des de 1970:
...la felicidad de las mujeres ha decaído desde 1970. Parece que el importante progreso social de la mujer en ámbitos como la educación, el trabajo, el control de la reproducción o la creciente participación masculina en las tareas del hogar y la educación de los hijos, no se ha plasmado en una mayor felicidad femenina. Es más, la creciente insatisfacción se da tanto en trabajadoras como en amas de casa, tanto en casadas como en solteras y separadas, tanto en altos niveles de educación como en bajos y tanto en jóvenes como en mayores.

Otro resultado destacable es que la gente de izquierdas es más infeliz que la de derechas, aunque la explicación parece no tener nada que ver con la política: los de derechas son más religiosos y tienden a estar casados en mayor proporción y resulta que, a igualdad de ingresos, la gente religiosa y casada tiende a ser más feliz.