És el debat que està sobre la taula als Estats Units, com molt bé recull avui Pilar Rahola:
...si el avance del fundamentalismo estuviera acotado a Pakistán, sería menos grave, a pesar de la gravedad de que ello ocurra en un país que tiene la bomba atómica. El problema principal es que está mundializado, presenta una extraordinaria capacidad de seducción y no para de tener éxitos. Veamos algunos de los fracasos más sonoros, en la ardua lucha contra este fenómeno totalitario: Osama bin Laden sigue libre; el presidente de Sudán, Omar al Bashir, se ríe de las órdenes de detención internacional y pasea con honores por los países de Oriente Medio; organizaciones como Hizbulah o Hamas se refuerzan con dinero y armamento; en Egipto, los Hermanos Musulmanes dominan completamente la oposición al Gobierno; en Afganistán, los talibanes vuelven a tener un ejército poderoso; en Pakistán, lo dicho; en Somalia, los islamistas de Al Shabaab crecen en número e influencia; en Nigeria dominan el norte del país; su influencia crece en las repúblicas musulmanas de la antigua URSS; dominan en Yemen; de la mano de Chávez, Irán ha empezado a influir seriamente en Sudamérica; y enel resto de países, incluyendo Europa, el magnetismo fundamentalista crece entre los jóvenes musulmanes.