Adéu a Nihil Obstat | Hola a The Catalan Analyst

Després de 13 anys d'escriure en aquest bloc pràcticament sense interrumpció, avui el dono per clausurat. Això no vol dir que m'hagi jubilat de la xarxa, sinó que he passat el relleu a un altra bloc que segueix la mateixa línia del Nihil Obstat. Es tracta del bloc The Catalan Analyst i del compte de Twitter del mateix nom: @CatalanAnalyst Us recomano que els seguiu.

Moltes gràcies a tots per haver-me seguit amb tanta fidelitat durant tots aquests anys.

dimarts, 4 de juny del 2013

L'art de la prestidigitació fiscal a Catalunya

...¿cómo se mide la diferencia entre lo que pagamos y recibimos del Estado? El informe de la Generalitat (*) (pág. 28) cifra en 50.093 millones de euros la recaudación que el Estado obtuvo en Cataluña en 2010, y desglosa esta cifra en figuras impositivas (IRPF, IVA, Sociedades, etc.) o conceptos (cotizaciones a la Seguridad Social) fácilmente reconocibles y a los que de forma directa o indirecta, y en menor o mayor medida, todos hemos contribuido. Por otra parte, el informe de referencia (pág. 50) cifra en 49.319 millones de euros el valor de los servicios prestados por el Estado en Cataluña, entre los que se encuentran pensiones, infraestructuras, inversiones de entes públicos como ADIF, Aena y Puertos del Estado, defensa, intereses de la deuda, transferencias del sistema de financiación autonómica, etc. Todas ellas partidas conocidas y vinculadas de forma unívoca a epígrafes de los Presupuestos del Estado.

Estas dos cifras, procedentes de las estadísticas oficiales, son las que miden la incidencia en Cataluña de la actuación fiscal del Estado en 2010. Y su diferencia es el saldo fiscal catalán: en 2010 el Estado ingresó en Cataluña 774 millones de euros más que el valor de los bienes y servicios que prestó a esta comunidad (774= 50.093 -49.319). Este es el saldo fiscal catalán de 2010 que sale de los datos estadísticos: 774 millones de euros; un 0,4% del PIB catalán. Ésta es la realidad fiscal.

Por razones difíciles de comprender, el informe no calcula este saldo. En su lugar, introduce (pág. 52) un críptico cambio: de los 50.093 millones de ingresos considerados más arriba pasa a 60.577 millones, que denomina “Ingresos detraídos de Cataluña” en 2010. Es decir, añade 10.484 millones a los ingresos reales. Con este cambio, el saldo fiscal pasa de los 774 millones anteriores a los 11.258 millones (11.258= 60.093-49.319) que la Generalitat denomina saldo fiscal “con presupuesto equilibrado”. Este es el único saldo del que habla el informe. Un saldo que surge de una manipulación —la adición de 10.418 millones a los ingresos— que el ciudadano no entiende y que debe ser explicada.

El Gobierno catalán debe decirle al ciudadano en qué delegación de la Agencia Tributaria, o en qué oficina del Estado especialmente habilitada para ello, ingresó en 2010 su cuota parte de los 10.484 millones añadidos. Y como no se lo va a poder decir, porque tal ingreso no existió, deberemos convenir que la etiqueta "Ingresos detraídos de Cataluña" que el informe utiliza es estrictamente falsa.

Ante esta tesitura, el Gobierno catalán probablemente haría ver al ciudadano (pág. 9) que, aunque no un pago efectivo al Estado, los 10.484 millones añadidos sí constituyen una deuda que los catalanes adquirimos en 2010 para, junto con las demás comunidades, hacer frente al déficit del Estado en ese año. Pero si esto es así, el Gobierno catalán debe decirle al ciudadano en qué partida concreta del Presupuesto liquidado de 2010 de la Generalitat de Catalunya se encuentra el apunte que certifica esta variación de la deuda. Una vez más, no se lo va a poder decir porque tal endeudamiento simplemente no existe.


(*) “Resultats de la balança fiscal de Catalunya amb el sector públic central any 2010”.

ANTONI ZABALZA, catedràtic d'Anàlisi Econòmica de la Universitat de València, va ser secretari d'Estat d'Hisenda entre 1991 i 1993 en el govern de Felipe González.