¿Sabía que hay siete jóvenes Marines y un miembro del cuerpo médico de la Marina sentados ahora mismo en una prisión militar esposados en piernas y cintura - a pesar del hecho de que no han sido acusados de ningún crimen?No ho sabia, amic lector? El seu diari, la seva cadena de televisió o de ràdio preferida, sempre tan ràpida a denunciar les "massacres" dels marines a l'Iraq o de l'exèrcit israelià als territoris palestins, no l'han informat d'això? No li han denunciat aquesta "bàrbara violació dels drets humans"? Si que és estrany, oi?
Los hombres se encuentran en confinamiento en solitario, encerrados en celdas 8'x8' en Camp Pendleton, San Diego, mientras los investigadores investigan un incidente del 26 de abril en relación con el Tercer Batallón, 5º Regimiento, Primera División Marine. Están entre rejas 23 horas al día; los familiares sólo pueden verles a través de Plexiglass de una pulgada de grosor.
Igual que la doble moral, la pressumpció d'innocència és també unidireccional.Estos hombres - nuestros hombres - pueden ser inocentes. Pueden ser culpables. Pueden presentarse cargos o no, esta semana. Pero esto es mucho más seguro: las filtraciones mediáticas y la Murtha-ficación de los medios ya se están cobrando un alto coste en las tropas y sus familias. Los titulares ya les han condenado: "Asesinato de iraquí planeado por marines, afirma oficial" y "Marines planearon matar a civil iraquí, colocando pruebas después".
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No se escucha ni un silbido aún de la American Civil Liberties Union. La página web de los cruzados auto-santificados de los derechos individuales contiene cientos de artículos acerca de los derechos de sospechosos de al Qaeda y una indignada circular de prensa acerca de los suicidios de sospechosos en la Bahía de Guantánamo. Pero ni una mención a los ocho de Camp Pendleton. Por su parte, los grupos de derechos humanos estaban demasiado ocupados derramando lágrimas por el suicidio terrorista de Guantánamo y elevándolos a la categoría de "héroes", en palabras de William Goodman, del Centro de Derechos Constitucionales. Los viñetistas editoriales han estado ocupados alterando el logotipo del Cuerpo de los Marines y representando a las tropas como asesinos de bebés.