La Conferència internacional de donants va aconseguir arrplegar ahir a El Caire un total de 3.500 milions d’euros per a la reconstrucció de Gaza, i ni un sol cèntim per compensar les destrosses provocades pel continu llançament de cohetes de Hamàs contra poblacions israelianes durant els últims anys. Segurament, com diu Jorge Marirrodriga, es tracta d’una lliçò de proporcionalitat políticament correcte.
De verdad quieren reconstruir Gaza? ¿Se trata de verdad de desarrollar el territorio? Entonces no den nuestro dinero. En vez de ello controlen ustedes la reconstrucción, que se hará con nuestro dinero. No fomenten más la corrupción con nuestro dinero y quítenle de esta manera a Hamás el monopolio de la educación y la sanidad. Construyan con nuestro dinero hospitales, escuelas e infraestructuras pero también cines, teatros y lugares de esparcimiento. ¡Abran un McDonald’s en Gaza! Nunca lo harán ¿Saben quién se negaría? Los mismos a los que las únicas infraestructuras que les interesan son los túneles. Los mismos que ahora piensan en cómo emplear nuestro dinero para tener sometida a su gente y atacar a Israel… proporcionadamente.